Cada vez estamos más concienciados de la importancia de cuidarnos, de llevar una alimentación sana y equilibrada, de hacer deporte, de cuidar nuestra piel, etc. Ya no hay edad para hacer o deshacer. Sentirse sano y joven es cuestión de voluntad.
Tanto es así que son muchos los que deciden cuidarse cuando ya no son unos niños. Uno de los casos que más llaman la atención es el de «ponerse aparatos». Años atrás, la ortodoncia era algo que solo se veía en niños y jóvenes pero, gracias al cambio en el comportamiento de los individuos y, sobre todo, gracias a los avances tecnológicos, este hecho se ha convertido en algo normal.
Cada vez son más los adultos que se deciden por un tratamiento de ortodoncia, ya que existe una amplia gama de productos dependiendo de las necesidades de cada persona. Uno de los tratamientos más demandados es el de la ortodoncia invisible o ortodoncia Invisalign. Como se puede imaginar, se trata de una ortodoncia invisible, ideal para aquellos que nunca se atrevieron con los míticos brakets metálicos nada estéticos. La ortodoncia invisible es ideal para aquellos quienes tienen un especial cuidado de su imagen personal.
Ventajas de la ortodoncia Invisalign
- Es invisible, prácticamente imperceptible para los que te rodean.
- Se puede manipular, es decir, poner y quitar a la hora de injerir alimentos.
- No existen limitaciones a la hora de comer. Todo lo que te gusta está permitido.
- Muy cómodo a la hora de cepillar.
- No existen las urgencias. No deberás ir al tu dentista a deshoras.
- No irrita la boca.
- Permite seguir la evolución del tratamiento.
Ya no es necesario lucir una sonrisa metálica para conseguir una sonrisa perfecta.