La primavera está aqui y con ella, la rutina de belleza para el cuidado de la piel debe cambiar para lucir espectacular. La piel es el primer órgano que detecta los cambios climáticos, de ahí que su cuidado requiera especial atención. la piel requiere de una serie de cuidados específicos en primavera, que deben ir encaminados a recuperarla de su etapa invernal y a protegerla de las agresiones futuras.
Tomar el sol tiene muchos beneficios, y nos ayuda, entre otras cosas, a conseguir la vitamina D tan necesaria para muchas de nuestras funciones. Sin embargo, hay que disfrutar de “Lorenzo” con precaución y proteger nuestra piel de sus efectos dañinos. Aquí te recordamos algunas pautas, científicamente probadas, para cuidar tu piel esta primavera.
Una forma muy sana de conseguir un bronceado perfecto y un aspecto mucho más saludable es comer frutas y verduras. Estos alimentos son ricos en carotenoides, con muchas propiedad saludables, que mejoran el sistema inmune y dan a la piel un color más dorado.
El frío de los meses de invierno seca mucho la piel. Según la Academia Española de Dermatología y Venereología, es recomendable emplear cremas hidratantes y humectantes, como aquellas que contienen glicerina, propilén-glicol, urea o lactato sódico.
En primavera, aunque el sol caliente con menos fuerza, también es necesario usar protección solar. Basta con emplear un factor del 15, si bien para exposiciones prolongadas al sol es conveniente usar factores más altos.
1. Es importante preparar la piel ante los primeros rayos del sol. Usa protector solar, ya que la exposición al sol daña y envejece la piel. Elige la crema más adecuada a tu tipo de piel para evitar el exceso de grasa, o por el contrario que la reseque.
2. Haz ejercicio habitualmente, de esta forma oxigenas el organismo y la piel. Cuando practicas algún deporte a través del sudor se eliminan toxinas que dañan la salud de tu piel.
3. En temporada de calor las alergias aumentan, por ello debes poner especial atención a tu cutis, ya que algunos de estos padecimientos irritan y enrojecen la piel.
En primavera se empiezan a tomar el primer sol, la piel no esta preparada todavía ya que no ha tenido tiempo de reaccionar, es por ello que se ha de poner máximo cuidado en proteger y aplicar filtros solares de alta protección, en esta estación es cuando aparecen las alergias al sol, que aparece en forma de rojez excesiva, granitos difusos por toda la zona y picor.